EL GRAN DÍA: LA PELÍCULA
Ya he oído muchas veces, quizás demasiadas, el típico
- ¡Ay! -
porque primero va siempre un 'ay' y luego va esta exclamación:
- ¡Si te hubiéramos hecho caso con lo del video...! -
Pues si me hubierais hecho caso con lo del vídeo ahora tendríais el documento vivo de aquel día.
Ni más ni menos.
Lo mismo, te estoy diciendo algo que ni fu ni fa, pero la película, el trailer (que es como cuando vas a ir al cine y antes ves un resumen que te engancha) y los crudos del video son todo aquello que las fotos no pueden mostrar (y viceversa).
Para mí, los dos son como hermanos gemelos, son dos entes distintos
pero no pueden vivir el uno sin el otro.
Está claro es que al final es cosa vuestra.
Lo que es más importante es que todo quede reflejado como era,
incluso las copas medio llenas, las 'Team Bride' haciéndote un baile como si no hubiera un mañana, los besos que os disteis,
las lágrimas de tu madre al regalarle una pulsera preciosa, tu cuñada llorando emocionada al dedicaros unas palabras, tu abuela más orgullosa que ninguna otra persona
del planeta tierra...
Vosotros abrazándoos, emocionados, felices, enamorados.
Eso es un video de boda, dinámico, emotivo y con todas sus capas.